Sugiero que en el 4º grado, y sobre todo en el 5º y 6º grado de educación primaria, se enseñe la matemática de la siguiente manera:
Aritmética (adición, sustracción, multiplicación, división e ideas/nociones de potenciación y división) en el primer trimestre. Las fracciones, decimales, razones y proporciones, así como los porcentajes se dejarán para el segundo trimestre. Y la enseñanza de la geometría debería de darse paralelamente a la enseñanza de las unidades de medida (de masa, longitud y tiempo).
¿Por qué? Considero que en los últimos grados de enseñanza primaria se debe trabajar la geometría como herramienta de desarrollo del pensamiento algebraico; y para alcanzar dicho desarrollo los alumnos deben de contar con saberes previos, que son aquellos que han aprendido (o reforzado) durante los dos primeros trimestres.
Porque la geometría se va a enfocar desde dos puntos de vista:
a) Una geometría vivencial, es decir en la medida de lo posible diseñar estrategias para que los niños aprendan la geometría haciendo, poniendo en acción sus cinco sentidos (observando, trazando, coloreando, recortando, graficando, construyendo); y de esta manera adquirir la idea de que la geometría no son solamente fórmulas para memorizar y resolver ejercicios de aplicación, sino que la geometría nace de la vida misma y hacía ella debiera de dirigirse.
b) Una geometría que desarrolle el pensamiento lógico-matemático; y sobre todo el pensamiento algebraico. Para ello se diseñarán actividades en las cuales los alumnos potencien aprendizajes matemáticos anteriores y desarrollen, cada vez más, pensamientos abstractos y de jerarquía intelectual superior (análisis-síntesis, inducción-deducción).
Trazado de figuras geométricas
Si sabemos que la geometría, como su nombre lo indica, nació de la necesidad de medir la tierra, pues vamos a empezar nuestras clases vivenciales con el trazado de figuras geométricas en el suelo.
Para ello necesitamos:
Varios metros de soga delgada, cuerda o hilo pabilo grueso (de 4 a 8 m.)
Estacas de madera pequeñas (se pueden hacer con trozos de palos de escoba)
Yeso (para trazar las figuras)
Una comba o una piedra grande (para martillar las estacas y fijarlas en el suelo)
Dialogamos con los estudiantes sobre la necesidad de medir el suelo, ya se con fines agrícolas o de lotización de viviendas.
Primeros empezamos con el trazado de figuras rectangulares, luego pasaremos a las triangulares. Primero realizan trazados con medidas no oficiales (como pasos), luego los trazados podrán hacerse con guinchas o reglas de madera (empleando medidas oficiales).
Finalmente, los niños (en este caso de 10-11 años) realizarán esta tarea de manera autónoma; ahora viene el momento de un segundo reto: ¿cómo podríamos realizar el trazado de un círculo? es recordamos que hace 5000 años los hombres de Caral ya sabían hacerlo... ¡y qué círculos!
Estos videos son muy ilustrativos:
Y eso es todo por hoy
Hasta pronto
Leonardo Sánchez Coello
Profesor de Educación Primaria
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